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01.10.09 - 01.10.11
Felices dos añitos para mi blog, atrasados, pero bueno. En realidad pensaba que los cumplía el 26 de octubre, pero hace un par de semanitas vi que no, y soy tan vaga que ni ganas de publicar una entrada así. No me inspiro cuando sé que tengo que hacer algo, no sé por qué, eso es algo que tengo que cambiar. Bah, en realidad no es lo único. Son cosas que iré ''solucionando'' con el correr del tiempo. Ya de paso me justifico para explayarme, y hablar sobre mí, más que sobre el blog. A ver, qué decir, la verdad sin palabras de lo que me ha servido este sitio como desahogo. Muchísimo más que un Diario íntimo. Nunca serví para tener uno de esos. Con suerte escribía dos días en todo un año. Me aburro, me aburro fácilmente y desisto. Afortunadamente con él blogcito no me ha pasado, no todavía, y tampoco está en mis planes que pase. Es inexplicable lo bien que se siente poder escribir, poder expresarse, por más mal que lo hagas, nadie te va a corregir qué pusiste bien y qué no. Es genial no necesitar de una persona para hablar ciertas cosas, porque al escribirlo vos mismo te vas dando cuenta, ves las cosas desde otro punto de vista. Y esa es una de las principales utilidades, con lo que me cuesta confiar en la gente sería imposible ir contándoles ''mi vida'', de todas maneras, -por más que confiara más, eso no va conmigo, lo habré dicho cuatrocientas veces-... Es una de las pocas páginas que me hacen tener cierta continuidad.
Me pasaron volando estos dos años, pensar que en diciembre se cumplen también dos años de una fecha dura, una época difícil, cosas que cuestan superar. ''Superar'', no me gusta utilizar esa palabra para una ocasión así, los sentimientos no se superan, ni con la distancia, ni mucho menos cuando sabés que no vas a ver a esa persona nunca más. Extrañarla, sentir impotencia, ganas de abrazarla, y no poder hacer más nada que dedicarle una de tus mejores sonrisas. Porque sabés que es así, ya no va a estar con vos, ya no más abrazos, no palabras de aliento, nada. ''No todo está perdido'', todavía quedan los recuerdos, los momentos vividos, plasmados en una foto o en una entrada, como en este caso. Y de eso se trata. Las cosas que me hace recordar el blog no tienen nombre. De la primera a la última creación. Recuerdos lindos, cosas que te hacen sonreír, a pesar de que un porcentaje bastante alto de entradas sean canciones, también tienen su significado.
Me hizo dar cuenta que he madurado bastante, por la manera de escribir, por la manera de pensar.
Cuando lo creé, nunca pero nunca pensé que iba a formar una parte importante en mí, como ahora. Por más que no escriba todos los días, por más que a veces ni entre. Estoy segura que ni un psicólogo me hubiera servido de tanta ayuda...
